El panot Gaudí es un pavimento de forma hexagonal diseñado por Antoni Gaudí hacia 1904 y que se ha convertido en su obra no arquitectónica con más fortuna, la más editada y probablemente la más popular. El arquitecto la proyectó en 1904 para pavimentar las tierras de la Casa Batlló. Finalmente, este pavimento no se colocó por retrasos de producción y se utilizó para pavimentar los suelos de las plantas de servicio de la Casa Milà (La Pedrera). Fue el mismo Gaudí quien definió con cera el diseño de la pieza, lo que demostró su destreza en el ámbito escultórico.
El panot Gaudí rompe con la tradición de la baldosa cuadrada que tiene un motivo ornamental, ésta es de forma hexagonal. En la actualidad la baldosa está expuesta en el MoMA, el primer producto considerado diseño industrial y por la consiguiente revolución que originó a los modelos de su época, diseñados en este caso con una gran variedad de piezas para componer pavimentos similares. Gaudí soluciona así con el diseño un procedimiento complejo y de gran producción con una sola pieza.
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